Como madres, padres o cuidadores, una de las dudas más frecuentes es cuándo es el momento adecuado para que un bebé empiece a usar zapatos. Desde la fisioterapia pediátrica, especialmente desde el enfoque del desarrollo motor que trabajamos en Uxía Román Fisioterapia, la respuesta es más sencilla de lo que parece… y también sorprende a muchas familias.
Lo más importante: los bebés no necesitan zapatos para aprender a caminar
Durante los primeros meses y etapas iniciales del gateo y marcha, lo ideal es que tu bebé esté descalzo o con calcetines antideslizantes. Esto permite que:
- Sienta el suelo con toda la planta del pie.
- Active mejor los músculos implicados en la estabilidad.
- Desarrolle una pisada más funcional.
- Mejore su equilibrio y coordinación.
El pie del bebé es todavía muy blando y moldeable, con grasa protectora y estructuras inmaduras. Cuanto más pueda moverse de forma natural, mejor será su desarrollo.
Entonces… ¿cuándo deben empezar a usar zapatos?
Cuando caminan de forma autónoma en el exterior
El momento de poner zapatos llega cuando el bebé ya camina solo y necesita protección fuera de casa. Es decir, los zapatos no ayudan a caminar, solo protegen.
En interior, siempre que sea seguro, sigue siendo preferible que vaya descalzo.
¿Qué tipo de zapato debe usar un bebé?
A la hora de elegir, fíjate en estas características:
1. Suela fina y flexible
Debe poder doblarse con facilidad. Esto permite que el pie siga aprendiendo a moverse correctamente.
2. Ligero
Cuanto menos pese, menos interferirá en la marcha natural.
3. Puntera amplia
Que no apriete los dedos. Debe permitir que se muevan y abran para mantener el equilibrio.
4. Material transpirable
Evita humedad excesiva y favorece la salud de la piel.
5. Contrafuerte blando
Los bebés no necesitan sujeciones rígidas: su tobillo debe poder moverse libremente.
¿Y si mi bebé aún no camina?
Si todavía no camina, los zapatos solo deberían usarse para:
- Proteger del frío
- Salir a la calle en carrito
- Momentos puntuales
Pero nunca deben limitar el movimiento ni sustituir el contacto directo del pie con el suelo durante el juego.
Señales de que un zapato no es adecuado
- El bebé se lo intenta quitar constantemente
- Se tropieza más de lo habitual
- Le salen rojeces o marcas
- Parece que “arrastra” los pies
- Pierde estabilidad al caminar
Si ocurre, conviene revisar el modelo o consultar a un profesional.
En conclusión, el uso de zapatos en bebés debe ser funcional, gradual y respetuoso con su desarrollo motor. En Uxía Román Fisioterapia siempre recomendamos priorizar el juego descalzo y elegir calzado flexible y natural cuando llegue el momento.
Si tienes dudas sobre el desarrollo motor de tu bebé o necesitas una valoración individualizada, estaré encantada de ayudarte.